
afiche desempolvando
Convertirse en asiduo a las peñas de la ciudad, suele tener sus riesgos. Quizás, perder esa inocencia de los inicios, cuando se acepta con cierto embeleso lo que se propone —cierta pasividad, si se quiere—; y entonces llega un momento donde nos movemos inquietos en los asientos, y exigimos más, mucho más, de lo que en ocasiones se hace contra viento, marea e incomprensiones, por quienes todavía apuestan por una ciudad cultural.
Pero tal vez esto no sea del todo malo; porque todavía, luego de dos años de encuentros continuos, somos capaces de disfrutar como el primer día, y agradecer un espacio como “Desempolvando” —peña o no—, del Archivo Histórico Provincial.
Estemos claros: el gran reto siempre lo tienen los organizadores de estos espacios mensuales (dígase “Desempolvando”, la Peña del Menú, el Café Concert, las Páginas Abiertas, y otras muchas), de ofrecer cada día algo diferente, dentro de una línea central más o menos inamovibles.
Por eso agradezco infinitamente lo vivido este viernes 21 de junio, en el patio del antiguo VIVAC de Santiago de Cuba. Dedicado a los más famosos jueces y pleitos de la ciudad, el espacio cultural dirigido y conducido por José Pascual Varona (Pini), demostró que todavía tiene espacio para la originalidad.
Bien ideado, organizado y conducido, como pocas veces se logró imbricar el necesario —aunque a veces extenso— acápite histórico de esta peña, con los momentos culturales, tomando lo uno como pretexto de lo otro; complementando la ciencia con la cultura; y separando, inteligentemente, la historia de casi quinientos años de aconteceres en la ciudad, en bloques cronológicos lógicos.
Otro acierto fue el indicar, sin extenderse en su uso, la documentación que el archivo resguarda, referente a la temática tratada en la edición de cada mes. De esta forma se siembra en los presentes, historiadores o no, la curiosidad por revisar una documentación de innegables valores históricos.
Ya en detalles: por el patio del archivo desfilaron algunos de los más populares y recordados jueces santiagueros, representados por el Lic. Antonio Bravo Correoso, el juez de instrucción Arturo Manduley y la Lic. Palmira, primera fiscal del tribunal provincial de Santiago de Cuba; todos, dueños de una extraordinaria ocurrencia y protagonistas de no pocas leyendas urbanas.

Bailarín Abdel Elías
En el apartado cultural prestigiaron la tarde el joven coreógrafo y bailarín Abdel Elías y el trovador Jorge Noel, quien interpretó una canción de su cosecha y homenajeó a los juristas con el tema “El Mayor”, de la autoría de Silvio Rodríguez.
Además, y a esto dedico una mención especial, la actuación de la cantante Zulema Iglesias, a quien, muy ocurrentemente, Pini juzgó —con toga y toda la seriedad de un proceso penal— por sus “hábitos noctámbulos” en restaurantes y “espacios subterráneos” (en alusión al bar-restaurante Subway, en la calle Aguilera) de la ciudad.
Zulema fue “condenada” a cantar a los presentes, y podemos decir que cumplió con su condena, de forma extraordinaria; con la interpretación de la “Danza ñáñiga” de Ernesto Lecuona, con música de Chucho Váldes, tema que ya la identifica dentro del panorama musical santiaguero.

Zulema Iglesias
Los aplausos para la más reciente edición de Desempolvando. Se demostró que con un poco de imaginación y pocos recursos se hacen grandes cosas en materia cultural. Otra vez los organizadores subieron la cota de este espacio. ¿Por qué no confiar entonces en que sabrán superarlas?
El pase de diapositivas requiere JavaScript.
Publicado por nobelpg en
crónicas,
Culturales,
Desempolvando,
Fotos de Santiago de Cuba,
Música Santiago de Cuba y etiquetado
Archivo Histórico,
Archivo Histórico Provincial,
crónica,
crónicas,
cubanos,
cultura,
curiosidades,
historia,
música,
Pini,
Santiago,
Santiago de Cuba,
tradiciones,
trova,
trovadores santiagueros,
Zulema Iglesias